De acuerdo con el reporte publicado este lunes en el sitio digital del diario Corriere della Sera, basado en un reciente informe del Banco de Italia, en particular unos nueve millones de empleados se encuentra en el grupo de las personas altamente expuestas a perder sus puestos de trabajo, debido a la aplicación de esos avances tecnológicos.
El análisis de la referida institución financiera, titulado Una evaluación de la exposición ocupacional a la Inteligencia Artificial en Italia, establece que es un error considerar que la IA es solo una tecnología de reemplazo o una evolución de las existentes.
“No es así, es una tecnología transformadora, que cambia los negocios y la forma de producir, de forma distinta incluso a lo que ocurrió con los robots”, por lo que tendrá “graves consecuencias para el mundo del trabajo”, señala esa investigación realizada por los expertos Antonio dalla Zuanna, Davide Dottori, Elena Gentili y Salvatore Lattanzio.
Los especialistas subrayan que a diferencia de otras oleadas o revoluciones tecnológicas, la IA incide en diferentes categorías de trabajadores, una diferencia que también tiene que ver con el nivel de educación, pues las transformaciones anteriores afectaron principalmente a los empleados menos calificados.
Los perjudicados por la anterior revolución tecnológica fueron los empleos en la industria manufacturera y específicas, como la del automóvil, pero “en este caso los riesgos son mayores para quienes tienen un nivel educativo medio o alto”, a la vez que enfrentan peligros quienes desempeñan trabajos de elevada especialización, apuntan.
Ante esta situación, en Italia “tendremos que lidiar con muchos que tendrán que cambiar de trabajo, que necesitarán volver a capacitarse”, afirma esa fuente, y alerta que “siendo un país que ya gasta 164 mil millones en asistencia, esperamos el habitual coro” sobre la necesidad de recursos para paliar el desempleo y otras consecuencias de la IA.
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