Según los hallazgos de los científicos dirigidos por el profesor Antonis Bartsiokas, el material descubierto en Vergina, la capital de la antigua Macedonia, son restos de un quitón.
Este, a su vez, era el principal tipo de vestimenta masculina y femenina en la antigua Grecia.
La tela inusual se encontró en un cofre de oro en el complejo del museo Royal Tombs en Virginia, y que también contiene restos humanos cremados y una corona del metal precioso.
Por otro lado, los estudios químicos y microscópicos del material de color púrpura mostraron que el quitón no era nada simple y contenía algodón y un material mineral específico.
Todo esto era raro en la Grecia de la antigüedad, pero típico de la alta nobleza de Persia.
Después de analizar los materiales, Bartsiokas concluyó que los restos de ropa encontrados probablemente sea un traje de Alejandro Magno, que usó después de la derrota del ejército del rey persa Darío III en Gaugamela y la posterior conquista de Persia por los griegos.
Posterior a la muerte de Macedonia en el 323 a.c. probablemente este atuendo fue heredado por su hermano Felipe III Arrideo, cuyos restos, junto con el quitón, fueron encontrados en el ataúd, afirma el investigador.
Esta hipótesis refuta la versión ampliamente aceptada de que los restos del padre de Alejandro, el rey macedonio Felipe II, están enterrados en el complejo de las Tumbas Reales de Vergina, donde actualmente se exhibe el cofre de oro.
La necrópolis, no saqueada en la antigüedad, con cientos de artefactos únicos en su interior en su forma original, fue descubierta por arqueólogos en 1977.
Uno de los hallazgos más valiosos es un sarcófago de singular belleza hecho de oro puro con el sol de Virginia grabado, símbolo del poder macedonio.
Si la versión de Antonis Bartsiokas es correcta, entonces el cofre dorado del sarcófago no contiene los restos de Felipe II, sino los del hermano de Alejandro Magno, Felipe III Arrhidaeus.
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