Según el medio, la más reciente prueba fue la reunión de ministros de Defensa de las naciones miembros (Canadá, Francia, Alemania, Italia, Japón, Reino Unido y Estados Unidos), celebrada en Italia, y primera de su tipo en todos los tiempos.
En esta cita, comandada por EEUU y no concordante con la misión y la naturaleza originales del G7 -trabajar por el progreso económico del mundo occidental-, participaron hasta representantes de la Unión Europea y de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), indicó.
El comentario remarca que allí se planteó un mayúsculo disparate al afirmarse que el marco de seguridad internacional se torna cada vez más vulnerable a causa de Rusia, China, la RPDC y otros Estados soberanos e independientes.
También se adoptó una declaración conjunta -señala- que incita al enfrentamiento entre las naciones, con lo que el G7 dejó traslucir que sus integrantes, liderados por Estados Unidos, son en realidad “ejecutores a destajo de la guerra”.
Este grupo de avaros, que no representa a la comunidad internacional ni tiene en autoridad para supervisar y controlar a Estados soberanos -acusó-, esta vez discutió indebidamente temas de seguridad global, habló de confrontación incompatible y justificó la ampliación de su industria de defensa.
Esta es una práctica abierta de pautas de doble rasero, un desafío frontal a la paz mundial y una declaración dirigida a reanimar a la nueva guerra fría, señaló.
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