Por ejemplo, en el Mercado establecido en el parque Daniel Hernández, en Santa Tecla, La Libertad Sur, este viernes, la hilera de personas en dos colas, una para mayores y otra para la población de menor edad era pequeña y la oferta era muy variada, y sobre todo, a bajo precio.
Ocho bananas por un dólar, cinco plátanos por igual precio, 12 limones grandes por igual precio, y así precios módicos para tomates, brócoli, coliflor, repollo, piña, manzanas y un sin numero de producto que permiten a la población triplicar cantidades que normalmente adquieren en el Mercado Central cercano.
Llama la atención la oferta de paquetes de pollo de 10 libras a 9.50 dólares, un ahorro de cerca de más de dos dólares respecto a otras fuera de la estatal.
Desde julio pasado esos abastos se convirtieron en una opción de abastecimiento con incidencia directa en la reducción de precios de los productos de la canasta básica.
Al respecto, el presidente de la Defensoría del Consumidor, Ricardo Salazar, citado por medios de prensa, destacó que El Salvador es uno los países centroamericano con los precios más bajos en alimentos, gracias a la estrategia compuesta por la implementación de los agromercados.
Los precios en estos establecimientos influyeron sin dudas en que El Salvador aparezca hoy con el índice de inflación del sector alimentos y bebidas no alcohólicas más bajo de la región.
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