Por Fausto Triana
El favoritismo del brasileño Vinicius Junior para conquistar el máximo trofeo individual del deporte de las multitudes en Europa sería un aliciente para los merengues, que todavía no despiertan de la pesadilla del pasado sábado con el 0-4 ante el Barça de Hansi Flick.
Para los expertos hay dos temas medulares en cualquier análisis del Clásico. El primero, la dinámica ofensiva que logró imprimirle el técnico alemán a los azulgranas junto con el gran momento de forma de Robert Lewandowski, Raphinha y Lamine Yamal.
El segundo, los problemas del entrenador de la “casa blanca”, Carlo Ancelotti, para hacer funcionar a un equipo lleno de estrellas en el cual los egos parecen ir por delante, además de la ineficacia del francés Kylian Mbappé.
Aunque es todavía muy joven el torneo local, los seis puntos de ventaja del Barcelona sobre el Real Madrid ya son una señal de alarma. En especial, cuando los catalanes aguardan por la puesta en forma de Gavi (tras larga lesión) y Dani Olmo, y el regreso del uruguayo Ronald Araujo.
En el horizonte cercano, el derbi catalán del domingo Barcelona-Espanyol y un día antes Valencia-Real Madrid, en ambos casos con superioridad en el papel de los dos colosos del balompié en este país ibérico.
Las críticas a Ancelotti pasan por muchos aspectos, como no dar más juego al jovencito turco Arda Guller en un mediocampo que funciona mal desde el retiro del germano Toni Kroos. O de colocar en el banquilo a Mbappé en ciertos momentos por sus imprecisiones repetidas.
No cuenta con su arquero estelar, el belga Thibaut Courtois, oportunidad mal aprovechada por el ucraniano Lunin en el Clásico, ni tampoco con el brasileño Rodrygo Goes, lo que abriría las puertas a Brahim Díaz.
Mientras tanto, el Atlético de Madrid completó una pésima semana tras caer frente al Lille 1-3 en Champions League, y ceder contra el Betis 0-1 en LaLiga, para alejarse a 10 puntos del Barça.
Empero, como el fútbol en Europa no da tregua, luego del venidero fin de semana vuelve la Champions, con duros compromisos para los de Madrid. Los merengues ante el Milán y el Atleti en choque con el París Saint Germain.
Más cómodo y hasta relajado, el Barcelona se las verá con el Estrella Roja de Belgrado.
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