«Van a hacer trampa. Trampas. Eso es todo lo que quieren hacer, trampas», afirmó Trump, quien casi punto de una nueva cita en las urnas aún sostiene, sin fundamento, que en 2020 el demócrata Joe Biden no ganó y que le robaron la elección.
Durante un mitin este mes en Juneau, Wisconsin -uno de los siete estados clave del actual ciclo electoral- el exmandatario opinó que haciendo fraude «es la única forma en que van a ganar. Y no podemos permitir que eso suceda, y no podemos permitir que vuelva a suceder. No vamos a tener ningún país».
Similar retórica (incendiaria) fue la que estimuló más de tres años atrás a miles de sus simpatizantes a irse contra el Capitolio y provocar el caos y violencia el 6 de enero de 2021, cuando una sesión conjunta del Congreso certificaba la victoria electoral de Biden.
En un mitin en Greenville, Carolina del Norte, la semana pasada, Trump volvió sobre el mismo argumento infundado. Mirando al presidente del Comité Nacional Republicano, Michael Whatley, y a la multitud preguntó: «Lo están intentando, pero no van a salirse con la suya, ¿verdad?», reseñó NBC News.
También en un rally en Prairie du Chien, Wisconsin, en septiembre, el expresidente advirtió que ganaría a pesar de que le hagan trampa y que luego procesaría a los involucrados en el presunto fraude electoral.
«Cuando ganemos, vamos a procesar a las personas que hacen trampa en esta elección”, subrayó Trump, que incluso dijo: “Y si podemos, volveremos a la última, también, si se nos permite”, refiriéndose a las elecciones de 2020. “Vamos a procesar a la gente, así que al menos saben que eso va a pasar”, amenazó.
El expresidente Trump da todavía por sentado que fue legítimo ganador de los comicios de hace cuatro años y las falsas alegaciones de interferencia electoral demócrata han sido una pieza central de su campaña en esta contienda.
Los peligroso es que actualmente se cree ya con las llaves del Despacho Oval de nuevo en sus manos y plantea dudas preventivas sobre los resultados, lo cual podría preparar el escenario para posiblemente desafiar el resultado y volver a sumir al sistema electoral en el caos.
Un análisis de NBC News encontró que Trump mencionó la probabilidad de que los demócratas hagan trampa en las elecciones de noviembre en 14 de sus últimos 20 mítines.
De acuerdo con los reportes de prensa, los demócratas ya se están preparando para que Trump declare un triunfo prematuro la noche de las elecciones o impugne legalmente los resultados si pierde.
Algunos aliados del republicano de hecho han especulado a la propia cadena televisiva que Trump podría declararse ganador aún sin los resultados decididos.
“Por supuesto”, enfatizó la candidata demócrata y vicepresidenta Kamala Harris a NBC News en una entrevista el martes pasado cuando se le preguntó si su campaña se está preparando para tal escenario.
“Esta es una persona, Donald Trump, que intentó deshacer una elección libre y justa, que todavía niega la voluntad del pueblo, que incitó a una turba violenta a atacar el Capitolio de los Estados Unidos y 140 agentes de la ley fueron atacados” (y cinco personas perdieron la vida).
Aceptar los cómputos para Trump equivaldría a “si todo es honesto”, entonces “aceptaría con gusto los resultados. Si no lo es, hay que luchar por los derechos del país”, apuntó en mayo pasado al diario Milwaukee Journal Sentinel.
Y con estos truenos queda claro que todo será honesto y sin trampas si gana él.
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