La vicepresidenta de Victoria, la jueza y diputada Marina Tauber, condenó la actuación de la Policía, la que impidió a la delegación del bloque y a sus partidarios entrar en el edificio del Tribunal Constitucional, según informó el canal Moldova 1.
«Hemos venido al tribunal para presentar un recurso sobre la anulación de los resultados del referéndum republicano, pero la Policía, en contra de la ley, no deja entrar en el edificio a los representantes del bloque Victoria, a pesar de que están aquí diputados, dijo Tauber.
La nota de prensa precisa que tras las discusiones, las fuerzas del orden permitieron la entrada al Tribunal Constitucional a quienes habían llegado como parte de la delegación.
El ente jurídico se reunirá este jueves para debatir el posible reconocimiento de los resultados del referendo. Solamente las personas invitadas tendrán acceso a la sala de sesiones del tribunal.
La Comisión Electoral indica que la participación en el plebiscito fue del 50,72 por ciento, con un 50,35 que votó a favor y 49,65 en contra, pero dentro de Moldavia el plebiscito fracasó, pues el 54 por ciento de los votantes lo hizo en contra.
Como resultado, con la citada participación en el referéndum, solo el 22,5 por ciento de todos los ciudadanos del país apoyaron realmente el cambio constitucional.
La mayoría de los partidos de la nación, incluidos los proeuropeos, consideran controvertidos estos resultados y se pronunciaron en contra de su introducción en la ley fundamental.
En el referéndum, los moldavos debían responder a la pregunta: «¿Apoya la modificación de la Constitución para que Moldavia se adhiera a la Unión Europea?».
El referéndum se celebró al mismo tiempo que las elecciones presidenciales en el país. Los observadores afirman que el plebiscito estaba diseñado para ayudar a la presidenta Maia Sandu a ser reelegida para un segundo mandato en medio de una crisis económica y las protestas de la oposición.
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