Según observadores, esas contiendas por el Capitolio podrían deparar sorpresas el martes 5 de noviembre, día de las elecciones generales en el país.
Las más disputadas son las determinarán qué partido obtiene la mayoría en la Cámara de Representantes y el Senado, lo que tendrá un impacto sustancial en la agenda del próximo presidente o presidenta.
Sin dudas, como opinan los expertos, los duelos por los escaños federales en el legislativo se decidirán por una combinación de factores, incluida la participación electoral y si los candidatos tienen una amplia capacidad para vencer desafíos.
Una de las carreras que podría inclinar la balanza hacia el lado republicano en el Senado está en la batalla que libran el legislador trumpista de dos mandatos Ted Cruz, de 53 años, y la esperanza demócrata depositada en Colin Allred, de 41, abogado y exjugador de fútbol americano que sirve en la Cámara de Representantes por Texas.
Los demócratas están enviando millones de dólares más al estado para respaldar la campaña de Allred, en un bastión republicano donde, si derrotara a Cruz, ayudaría a proteger la mayoría del Partido Demócrata en la Cámara Alta.
De acuerdo con los cálculos, el Partido Republicano necesita ganar dos asientos en el Senado para asegurar el control de ese hemiciclo y uno lo tiene prácticamente asegurado en Virginia Occidental.
Otra de las competencias que capta aquí la atención es la candidatura independiente al Senado por Nebraska de Dan Osborn, un mecánico de 48 años, veterano de la Marina y líder sindical.
Osborn recaudó mucho más que la senadora republicana Deb Fischer y lanzó anuncios publicitarios que prometían cambiar el status quo.
En un anuncio, dice que el Senado está formado por “millonarios controlados por multimillonarios” y critica a Fischer como una política de carrera que no está cumpliendo con Nebraska y que solo está en el Congreso para enriquecerse, según reseñan medios locales.
El duelo por el puesto del Senado por Maryland constituye también un punto de interés. El republicano Larry Hogan ganó dos carreras para gobernador allí en 2014 y 2018, en un estado que es profundamente azul.
Ahora Hogan se lanzó en busca de la Cámara Alta con la idea de convertirse en el primer republicano en ganar un escaño en ese órgano del legislativo por Maryland desde 1980.
Su contrincante es la demócrata Angela Alsobrooks, candidata federal primeriza y exejecutiva del condado de Prince George. Los sondeos la ubican a ella delante del republicano.
En Florida hay dudas para los demócratas sobre las posibilidades de derrotar a Rick Scott, en un estado que cada vez es más rojo. Su oponente es la exrepresentante Debbie Mucarsel-Powell.
El exgobernador Scott ha demostrado una asombrosa capacidad para lograr victorias a nivel estatal por el más estrecho margen en Florida, incluso durante las oleadas rojas de 2010 y 2014 y la azul de 2018, destacó el diario The Hill.
Entre las campañas destacadas se incluye igualmente la del Distrito 10 de Pensilvania, donde Scott Perry, de extrema derecha, exlíder del Caucus de la Libertad (Freedom Caucus) enfrenta la seria amenaza de la demócrata Janelle Stelson, una expresentadora de noticias de televisión muy conocida en el área.
En las elecciones que ocurrirán en cuatro días se renovarán 34 de los 100 escaños del Senado (controlado en este momento por los demócratas) y los 435 de la Cámara de Representantes (en poder de los republicanos).
Los votantes determinarán asimismo otros cargos públicos a nivel estatal y local.
Quienes resulten electos conformarán el 119 Congreso de Estados Unidos, que funcionará desde enero de 2025 a enero de 2029.
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