Hace varias semanas Bukele dijo que: «Nuestra próxima meta es que el mundo vea a El Salvador más por su milagro económico que por su milagro en seguridad.”
Parte de ese objetivo se ratificó durante los últimos días. “Octubre 2024 cierra como el mes más seguro en toda la historia de El Salvador”, escribió hoy el mandatario en su cuenta en la red social X.
Llegar a 27 días sin asesinatos atribuibles a las pandillas es un resultado relevante en un país que en marzo de 2022 registró en apenas un fin de semana más de 80 fallecidos a causa de la violencia de las pandillas.
El resultado se alcanzó la víspera cuando el 31 de octubre no se reportó ningún homicidio en el territorio salvadoreño.
El Plan Control Territorial (PCT), que algunos estados tratan de copiar, y el régimen de excepción, son las principales herramientas usadas por el gobierno para erradicar la violencia de los grupos delincuenciales y disminuir los asesinatos, cuyo índice tiene un pronóstico de 1.5 a 1.8 por ciento por cada 100 mil personas este año.
En 2023, ese indicador se situó en 2.4, un tope que colocó al país como referente de seguridad en el mundo, tras años de ser considerado uno de los estados más violentos.
La aplicación del PCT, arropado por el régimen de excepción permitió sacar de las calles a cerca de 83 mil pandilleros y presuntos colaboradores y destruir su logística valorada en mas de 700 millones de dólares anuales, en especial por la extorsión y el narcotráfico, además de ocupar centenares de armas de fuego.
El récord no es indicativo de que en el país no hay violencia, pues en días recientes ocurrieron varios hechos, en especial crímenes pasionales o vinculados a relaciones de parejas.
El índice de homicidios que reportan las autoridades está solo relacionado con acciones vinculadas a las pandillas pero, para muchos, es un logro sustantivo con ribetes de milagro por la impunidad con la que actuaban las maras en el país.
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