No obstante su intensidad, por la gran profundidad del epicentro no causó daños, informó el Instituto Geofísico del Perú (IGP).
El movimiento telúrico se produjo a las 14:39 horas a unos 50 kilómetros al este de la sureña población de Lunahuaná, parte de la región de Lima, y se sintió levemente en la capital.
El presidente del IGP, Hernando Tavera, precisó que el epicentro del sismo fue localizado a 139 kilómetros bajo la superficie, profundidad por la cual la mayor sacudida se sintió en las cercanías de Lunahuaná.
“Lo importante es que no hay evidencia de daños, simplemente a la población le ha dado un ligero susto”, añadió.
Tras el temblor, el Instituto de Defensa Civil recordó que, debido a que Perú se encuentra en una zona sísmica, la población debe tomar precauciones por si se produce un gran terremoto, como el que los sismólogos pronostican que habrá en algún momento.
Por ello, recomendó tener en casa una mochila de emergencia con comida enlatada, agua y otros medios para afrontar un evento sísmico, ante la cual se debe conservar la calma y dirigirse a las zonas de seguridad previstas.
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