Un comunicado de la representación permanente de la RPDC ante la ONU calificó de farsa a ese documento, presentado por más de 20 años por la Unión Europea (UE) bajo la instigación de Estados Unidos.
Se trata de otra provocación política que parte del malsano objetivo de manchar la imagen de nuestro muy digno Estado y de acabar con nuestra idea y régimen, señaló.
Afirmó que el proyecto contraviene la Carta de la ONU, que estipula el respeto a la soberanía y la no intervención en los asuntos internos de otras naciones, y a los esfuerzos de los países miembros por defender y fomentar los verdaderos derechos humanos a través del diálogo y la cooperación.
Aseveró que a causa de Estados Unidos y los países occidentales, la Declaración Mundial de los Derechos Humanos y las universales normas internacionales al respecto se han convertido en un medio político de intervención en los asuntos internos de otros países.
La situación real de los derechos humanos en la RPDC no la evalúan los hipócritas allende del continente y el océano, sino el mismo pueblo coreano, subrayó.
kmg/asg
