El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, informó que a esta hora permanece junto a las distintas entidades del Distrito, las Alcaldías Locales y los organismos de control, al frente de la situación creada en la Autopista.
Alertó el funcionario que hay probabilidades que esta tarde vuelva a llover, por lo que se trabaja articuladamente para responder a cualquier emergencia.
“Estamos en contacto permanente con los colegios de la zona, rutas del Sistema Integrado de Transporte de Bogotá están dispuestas para la evacuación y ambulancias y máquinas de bombeo están en el lugar para actuar ante cualquier eventualidad”, refirió Galán.
Debido a la situación suscitada por las intensas lluvias que provocó el desbordamiento del humedal de Torca, personal del Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático, la Policía y los Bomberos todavía trabajan para restablecer la movilidad en la región afectada.
Según reportes de medios locales, por lo menos dos mil 350 personas que quedaron atrapadas en la inundación fueron evacuadas durante la noche en buses, lanchas y otros vehículos.
Algunas escuelas en zona afectada suspendieron durante esta jornada sus actividades y también se vio afectado el servicio de transporte conocido como Transmilenio, según informó la gerente general de la empresa María Ortiz.
A juicio del mandatario del país, Gustavo Petro, las inundaciones ocurridas se deben a la urbanización desmedida de la sabana norte que pavimenta los suelos blandos de la ciudad y es asimismo consecuencia de construir vías y barrios sobre humedales.
“La Sabana está prácticamente destruida a pesar que la ley la protege. Se hicieron enormes negocios de volteo de tierras por la clase política de la región, y Bogotá quedo sin agua potable a pesar de las lluvias, por su propio volteo de tierras. La codicia sobre la tierra condujo a la destrucción de equilibrios vitales con el agua”, escribió en su red social X.
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