El magistrado del Tribunal de Distrito de Estados Unidos J. Campbell Barker, designado por el presidente electo Donald Trump durante su primera gestión, canceló el programa que permitiría a inmigrantes con estatus migratorio irregular casados con nacionales lograr un camino simplificado hacia la ciudadanía estadounidense.
Barker declaró ilegal esa política, lo que se considera una gran derrota para el gobierno saliente de Biden, quien impulsó el programa ‘Parole in place’ desde el pasado mes de junio para otorgar estatus legal a algunos cónyuges inmigrantes de ciudadanos de Estados Unidos.
El 13 de septiembre último un panel de jueces de la Corte de Apelaciones del Quinto Circuito ordenó a una corte federal de Texas que suspendiera administrativamente todo procedimiento relacionado con el proyecto, suspendido de forma temporal en agosto por orden de ese juez federal.
A finales de agosto, Campbell Barker dejó sin efecto temporalmente el programa en respuesta a una demanda entablada por una coalición de estados gobernados por republicanos encabezados por Texas.
La petición alegó que el ‘Parole in place’ es ilegal al otorgar beneficios migratorios sin la autorización del Congreso a extranjeros que no tienen admisión regular en Estados Unidos. La medida afectaría también a unos 50 mil hijastros sin papeles de ciudadanos.
El presidente electo prometió que en sus primeros 100 días en el cargo promulgará cambios en materia de inmigración, energía y política exterior.
Así lo dejan entrever las pistas legadas por el republicano, ganador en las elecciones presidenciales del 5 de noviembre después de una campaña tumultuosa que culminara con su sorprendente remontada política.
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