Según informaron medios locales, la explosión de la motobomba en horas de la mañana en la referida localidad afectó principalmente a miembros del Ejército Nacional y dejó a dos de sus integrantes heridos, uno de los cuales falleció luego.
A propósito del suceso, el jefe de Estado escribió en su red social X que el soldado caído Pedro Fonseca es un libertador y quienes lo asesinaron son represores del pueblo, como siempre han sido los represores, por simple codicia asesina.
El pasado 12 de octubre, el Ejército inició una ofensiva en El Plateado con alrededor de mil 400 efectivos, vehículos blindados y artillería de última generación.
Los uniformados lograron tomar el control del casco urbano de esa localidad que, según fuentes gubernamentales, desde hacía cinco años estaba bajo el dominio del Estado Mayor Central, grupo residual de las extintas Fuerzas Armadas Revolucionarias-Ejército del Pueblo.
También el mandatario reveló hoy que todos los soldados que participaron en la toma de El Plateado durante el primer día recibirán la Cruz de Boyacá, la máxima condecoración civil que el Gobierno de la República de Colombia concede a militares.
Aseguró además en su mensaje de esta jornada que el narcotráfico en la región del Cañón Micay no quiere que se instalen servicios de comunicación a la ciudadanía o se abran allí nuevas formas de producción.
La explosión en el mentado corregimiento coincidió con otra reportada en Jamundí, en el vecino departamento de Valle del Cauca.
Según Blu Radio, la detonación en el barrio El Jordán provocó heridas a unas 15 personas y daños en viviendas y comercios de la zona.
Por tercer día consecutivo, los habitantes de Jamundí resultan víctimas de un ataque.
Durante la noche del pasado miércoles un dron explotó cerca del hospital local, sin dejar lesionados, en tanto ayer un artefacto activado en una alcantarilla causó heridas a una mujer que caminaba cerca del cementerio del municipio y daños a una casa.
car/ifs