En declaraciones a la prensa, la mandataria llamó a los distintos precandidatos sometidos a las elecciones a tener la confianza de que se respetará el voto de sus seguidores.
Y que esto le dé la confianza también al pueblo que los que van a salir electos para las elecciones generales sean quienes en realidad escogieron las instituciones y miembros de los partidos políticos, enfatizó la gobernante.
Por otro lado, la primera mujer presidenta de Honduras resaltó la necesidad de aprobar la Ley de Justicia Tributaria para cubrir las grandes necesidades que existen en el país.
“Lo reiteramos por la necesidad que hay, a diario se ven demandas en todos lados de carreteras, escuelas, centros de salud, de reparaciones, y cada uno de esos pedidos uno quisiera resolverlos, pero el presupuesto es muy escaso”, enfatizó.
En ese sentido, Castro recordó que su Gobierno paga una deuda de 66 mil millones de lempiras anuales (unos dos mil 623 millones 915 mil 800 dólares estadounidenses), cuyos fondos no se sabe dónde fueron a parar, ni dónde se invirtieron.
“Es lógico que yo haga ese llamado en primer lugar a la Fiscalía para que se investiguen esos recursos, a qué cuenta bancaria personal fueron a parar, y en segundo, hacer un llamado a la conciencia de los grandes empresarios que durante tantos años no han pagado impuestos, a seguir el ejemplo del pueblo”, subrayó.
La jefa de Estado señaló que es necesario pagar impuestos para que luego ese dinero se vea reflejado en obras sociales como escuelas, carreteras y centros de salud, entre otras.
Con el referido proyecto de ley enviado hace más de un año al Congreso Nacional para su discusión y aprobación, el Ejecutivo hondureño aspira detener el abuso de las exoneraciones y hacer más equitativo lo referente a los tributos, de modo que paguen más quienes más ganen.
Datos oficiales indican que en 12 años se otorgaron en Honduras, por concepto de exoneraciones, 451 mil millones de lempiras (unos 18 mil 289 millones de dólares), un 116 por ciento superior a la deuda pública de la nación.
Según las autoridades, en esta nación centroamericana existen 300 mil empresas, de las cuales 21 mil son formales, 280 mil informales que sí pagan impuestos, mientras menos de dos mil no abonan los tributos.
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