El portavoz Fu Linghui destacó que, en respuesta a los desafíos actuales, las autoridades centrales intensificaron el ajuste macroeconómico e impulsaron una serie de políticas adicionales, lo cual influyó en un aumento significativo de los principales indicadores en octubre.
«Las ventas minoristas crecieron un 4.8 por ciento interanual, impulsadas por políticas de renovación de bienes de consumo, mientras que el sector servicios registró un incremento del 6.3 por ciento, el mayor crecimiento del año», enfatizó.
A su vez, el comercio de bienes mostró competitividad en un entorno de desaceleración global, con un incremento interanual del 4,6 por ciento en el valor total de importaciones y exportaciones.
De acuerdo con el vocero, la economía mantuvo la estabilidad en los sectores industrial y de inversión, así como en los niveles de empleo y precios.
En octubre, la producción industrial de empresas a gran escala creció un 5.3 por ciento interanual, mientras que la inversión en activos fijos acumuló un aumento del 3.4 por ciento en los primeros 10 meses del año.
La tasa de desempleo urbano se situó en el cinco por ciento y el índice de precios al consumidor subió un 0.3 por ciento, moderado por la disminución en los costos de alimentos y energía.
Fu también señaló un renovado optimismo en el mercado, con una notable recuperación en las transacciones de bienes raíces y un incremento significativo en la actividad bursátil.
En octubre, las ventas de viviendas nuevas y de segunda mano mostraron un crecimiento destacado y el volumen de transacciones en las bolsas de Shanghái y Shenzhen aumentó hasta 1.5 veces en comparación con el año anterior, dijo.
Según el portavoz, la confianza del consumidor también se fortaleció y registró su primera alza en seis meses.
El vocero indicó que la economía china mostró un avance estable y prometedor en octubre, aunque subrayó la persistencia de desafíos en el entorno internacional y en la demanda interna.
En el futuro próximo, el Gobierno planea fortalecer el control macroeconómico, fomentar la innovación, estimular la demanda doméstica y consolidar la tendencia de recuperación económica para garantizar un desarrollo de alta calidad.
China se encuentra inmersa en un proceso de profundización de la reforma integral y la apertura y prioriza además las industrias emergentes.
El gigante asiático fijó para 2024 un objetivo de crecimiento económico en alrededor del cinco por ciento.
npg/idm