A través de la Misión Permanente de Líbano ante la ONU en Nueva York, el Ministerio documentó los efectos de los bombardeos israelíes y sus repercusiones en el país, e insistió a los miembros del foro multilateral a asumir la responsabilidad y actuar para poner fin a la hostilidad del gobierno de Tel Aviv.
Según una nota divulgada aquí, Líbano reafirmó su adhesión a la implementación de la Resolución 1701 de manera completa, integral y paralela para garantizar la seguridad y estabilidad de la región.
La institución libanesa advirtió que la agresión de Israel tendrá consecuencias políticas y de seguridad graves, tanto en el presente como en el futuro.
Al mismo tiempo, alertó de las repercusiones negativas en los esfuerzos para lograr la estabilidad a lo largo de la Línea Azul (demarcación establecida por Naciones Unidas entre Líbano e Israel) y en todo Medio Oriente.
El Ministerio de Relaciones Exteriores reclamó al Consejo de Seguridad tomar la iniciativa de cumplir con su mandato de mantener la paz y trabajar urgentemente para imponer un alto al fuego de acuerdo con lo que establecen sus resoluciones, en lugar de la parálisis política injustificada.
Los persistentes bombardeos israelíes contra la capital y localidades de la nación levantina cobraron la vida de más de tres mil 544 personas, entre ellos al menos 200 niños, y otros 15 mil 36 resultaron heridos desde el inicio de la agresión el 7 de octubre de 2023.
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