Reportes de prensa indicaron que el enemigo israelí agredió a las fuerzas armadas libanesas de manera directa desde una unidad de artillería recién desplegada en la colina de Chamaa.
El diario nacional Al-Akhbar señaló que los equipos de extinción de incendios lograron extinguir el fuego desatado en las instalaciones de almacenamiento del puesto de control de Aamriyeh, en la carretera entre Tiro y Naqoura.
De acuerdo con el analista político libanés Khalil Nasrallah, Israel quiere presionar a la dirección del ejército y al Estado para someterlos a sus condiciones tras el alto al fuego.
A criterio del experto, Tel Aviv busca poner en confrontación al Ejército con la Resistencia de Líbano (Hizbulah) y la imagen muestra también la masacre cometida contra las Fuerzas Armadas cuando cedió a la presión estadounidense al no armarlo para poder repeler cualquier agresión.
El jueves, el comandante del Ejército, general Joseph Aoun, reafirmó el compromiso de las Fuerzas Armadas con la seguridad, la estabilidad y la soberanía de Líbano, en un acto por el 81 aniversario del Día de la Independencia.
Según expresó, las Fuerzas Armadas no abandonarán el sur porque es parte integral de la soberanía nacional, y trabaja en coordinación con la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil) en el marco de la Resolución Internacional 1701.
En su discurso, aseguró al pueblo de Líbano que “no hay vuelta atrás, y no hay temor por el ejército, que permanecerá a su lado, manteniéndose firme a pesar de todas las circunstancias, para defender la soberanía”.
Aoun señaló que el Ejército cumple sus misiones en todo el territorio libanés, enfrenta los intentos de desestabilización, “porque la unidad nacional y la paz civil son sus máximas prioridades, y son la línea roja”.
En este punto, el general reiteró que proteger y preservar la patria es una responsabilidad integral y compartida para todos los libaneses.
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