El Ministerio de Salud Pública de Líbano notificó una persona muerta y 10 heridos en un balance inicial del ataque aéreo israelí contra la zona de Noueiry, en Beirut.
Según el canal panarábe Al Mayadeen, las agresiones aéreas de este jornada apuntaron a áreas desde Ghobeiry hasta Al-Haddat, incluido Haret Hreik, y resultaron en las más violentas y de mayor tamaño desde el inicio de la escalada enemiga.
En el este de la nación, dos personas perdieron la vida como consecuencia de la incursión israelí en la granja Beit Salibi, al oeste de Baalbek.
Las autoridades sanitarias precisaron que los ataques aéreos en Srifa y Bazuriyah en el distrito sureño de Tiro ocasionaron siete ciudadanos heridos.
De acuerdo con el periódico nacional Al-Akhbar, el ejército israelí emitió una advertencia para evacuar Naqoura luego de una serie de agresiones aéreas que lanzó durante todo el día.
Fuentes de campo vincularon estas amenazas a la intención de Israel de destruir barrios adicionales en la ciudad fronteriza antes de un posible alto al fuego, después de no poder entrar en Naqoura a pesar de rodearla desde las direcciones de Alma Al-Shaab y Tair Harfa.
En este contexto, el gabinete libanés convocó a los ministros a una reunión mañana en el Grand Serail (Palacio de Gobierno) para discutir los acontecimientos actuales de la hostilidad israelí.
Por su parte, la Radio del Ejército israelí reflejó que las estimaciones en Israel sugieren que el alto al fuego en Líbano entrará en vigor mañana.
A la luz del ambiente positivo y las informaciones de prensa de un acuerdo en las próximas horas, el miembro del Parlamento de Líbano, Qasim Hashem, convocó a tener cuidado con la traición y la evasión del enemigo israelí.
En sus palabras, el diputado enfatizó que Líbano está comprometido con su soberanía y ofrecerá más detalles en el momento oportuno cuando la imagen del acuerdo de cese al fuego cristalice y las cosas sean definitivas.
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