Esta normativa jurídica surgió en respuesta a la propuesta de Ley Bolívar aprobada el 17 de noviembre por la Cámara Representante de Estados Unidos y consta de 18 artículos contra el bloqueo imperialista y por la defensa de la República Bolivariana.
Como se expresó en la exposición de motivos, la ley nace como un instrumento para hacer frente a las sanciones extorsivas que atentan contras los derechos humanos y demás garantías, además de ser contrarias al Derecho Internacional Público y la Carta de la ONU.
Entre sus novedades propone la inhabilitación política de por vida a las personas que “ayuden y se alíen con agentes extranjeros para imponer medidas coercitivas unilaterales al pueblo” venezolano.
Cataliza también la aplicación de la Ley de Extensión de Dominio para todos los que promuevan, participen, difundan o hagan apología a la aplicación de sanciones contra el país, así como será un agravante en el delito de traición a la patria.
En su programa de los lunes Con Maduro +, el jefe de Estado consideró anoche una iniciativa buena la adoptada por los legisladores “al crear desde Venezuela -cuna del Libertador- una ley libertadora y de justicia”, la cual estimó como “la verdadera Ley Libertador Bolívar”.
Auguró “penas gruesas” para todas las personas venezolanas, nacidas aquí o con ciudadanía nacional, que pidan, promuevan o apoyen llamados a sanciones criminales, bloqueos e invasiones militares o cualquier daño extranjero imperialista”.
El Presidente enunció que durante más de un año la derecha fascista promovió esa normativa que de manera infame le pudieron el nombre de Bolívar, y aseguró se trata de una ley de guerra contra el país.
Estamos preparados para enfrentar esta “ley basura” y derrotarla en todos sus efectos, subrayó.
Consideró el gobernante que la propuesta del Parlamento venezolano dotará a la democracia venezolana de un arma de justicia y derecho constitucional para defender la paz, y valoró ineludible «aprobar una ley así”.
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