El presidente de la APM, Marthel Jean insistió especialmente en el cierre de los tribunales en varias zonas debido a la violencia protagonizada por las bandas armadas.
«Esta situación ha paralizado el sector judicial desde hace más de tres años», lamentó Jean citado por el diario Le National.
Muchos tribunales, como los de la paz en Delmas, Croix-des-Bouquets, y en las regiones Sur y Norte quedaron desiertos y ahora están controlados por delincuentes, comentó.
El crimen organizado nos impide trabajar con normalidad, algunos magistrados tienen que operar en zonas extremadamente peligrosas, el Estado debe garantizar primero la seguridad para permitir el buen funcionamiento de todos los sectores, argumentó Jean.
La violencia también afecta a las escuelas de formación jurídica, como la Facultad de Derecho de Puerto Príncipe y la Escuela de la Magistratura.
Muchos secretarios judiciales huyeron del país, lo que deja incompleta la plantilla de los tribunales.
«En algunos juzgados, hay hasta ocho o nueve magistrados por solo dos secretarios. Esto tiene consecuencias directas en el desarrollo de las audiencias», lamentó Jean.
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