Al conmemorar este viernes el Día Internacional de Solidaridad con Palestina, un comunicado de la Cancillería demandó el fin de la “ocupación ilegal y la plena restitución de los derechos del pueblo palestino”.
Instó en ese sentido al derecho irrenunciable a establecerse como Estado libre, soberano e independiente, con las fronteras de 1967 y Jerusalén Oriental como su capital.
La República Bolivariana exigió, una vez más, que se cumpla el mandato de la Asamblea General de la ONU para que Palestina sea admitida como miembro pleno de esa organización.
Subrayó que ese organismo multilateral “no puede seguir siendo cómplice, por omisión, de la exclusión de un pueblo cuya legitimidad como nación, es incuestionable”.
Venezuela con la firme convicción de un mundo que cree en la justicia, la dignidad y el respeto irrestricto a los derechos humanos, se une a la conmemoración del Día Internacional de Solidaridad con el Pueblo Palestino, indicó.
La nota reafirmó el apoyo inquebrantable a la justa causa de Palestina que, durante casi 77 años, ha soportado, con una valentía extraordinaria, la ocupación, la opresión y las atrocidades cometidas por el régimen nazi de (Benjamín) Netanyahu.
Denunció que este viola de manera flagrante el Derecho Internacional y los principios fundamentales de las Naciones Unidas, mientras siguen cayendo bombas y misiles sobre las niñas, niños, mujeres y hombres de Gaza, Cisjordania y toda Palestina.
El Ministerio venezolano para Relaciones Exteriores expresó que Netanyahu “cruzó todas las fronteras y líneas rojas del derecho internacional”, especialmente, de la Carta de las Naciones Unidas y los órganos burocráticos de la justicia que conocemos no han sido capaces de detenerlo.
“Debemos ir más allá, la condena mundial debe dar paso a la justicia y evitar que la ONU desaparezca junto al pueblo palestino”, aseveró.
El Gobierno bolivariano afirmó que reconocer a Palestina no es un favor, sino “una deuda histórica y un acto de justicia que no debe seguir siendo postergado”.
Este Día Internacional de Solidaridad con Palestina no puede ser una conmemoración simbólica, debe ser un punto de inflexión para que la comunidad internacional asuma, con determinación y coraje, el compromiso con el pueblo palestino de poner fin a décadas de impunidad, concluyó.
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