Voluntarios de una ONG humanitaria de servicio en la instalación pidieron proteger a los desplazados y proporcionarles un correo seguro a aquellos que deseen huir del lugar.
El líder de las RSF, general Mohamed Hamdan Dagalo, coprotagoniza con el presidente del Consejo Soberano de Transición (CST), general Abdel Fattah al Burhan, la guerra civil que desde abril del año pasado desangra a Sudán y provocó la más grave crisis de refugiados que recuerda este país del noroeste africano.
En las últimas semanas las RSF desataron una orgía se asesinatos de civiles en la provincia de Yezira (centroeste) en venganza por la defección de su comandante, quien rindió las armas al CST.
El ataque de hoy contra el campo de desplazados de Darfur carece de explicación ya que la zona no representa amenaza contra las posiciones de las RSF ni las tropas del CST muestran interés en recuperarla.
En un hecho separado, un portavoz del CST acusó a Emiratos Árabes Unidos de proporcionar aviones no tripulados (drones) a sus rivales de la agrupación paramilitar en un atisbo de las fuerzas regionales que apoyan a los contrincantes, cifra la ecuación política del conflicto de la que poco se sabe a ciencia cierta.
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