Al clausurar anoche el acto de la XXIX graduación de cadetes del Ejército de Nicaragua, en el que también participó la vicemandataria Rosario Murillo, Ortega instó a promover paz a las potencias que lanzan bombas atómicas.
“A final de cuentas, lo ha demostrado la historia, por mucha potencia al final la victoria es de los pueblos», resaltó el líder sandinista desde el centro de convenciones Olof Palme, en esta capital.
En ese sentido, recordó la experiencia de Vietnam, y los jóvenes estadounidenses que murieron en esa nación asiática.
“Al final, Vietnam logró expulsar a las tropas norteamericanas y no se nos olvida la imagen en la embajada de los Estados Unidos cuando estaban bajando los helicópteros a llevarse el personal (…) o sea, una humillación para una potencia como los Estados Unidos”, rememoró.
El gobernante afirmó que lo anterior ocurre porque a Washington le importa poco que la juventud norteamericana vaya a entregar la vida por causas que no son justas, ni lleven beneficios al pueblo estadounidense, sino que, al contrario, le llevan dolor igualmente a los pueblos que ellos invaden.
Al respecto, se refirió a la situación política en Siria y afirmó que frente a esos acontecimientos, Nicaragua es escéptica.
“Porque allí están, no había terminado de entrar cuando ya empieza el gobierno de Israel a tomarse territorios sirios, y para asegurarse de que los saquen, empiezan también a bombardear y la aviación norteamericana empieza también a bombardear donde hay de estos grupos que llaman terroristas, pero que los armaban por uno de estos jefes (Abu Mohamed al Jolani), quien entró triunfante”, señaló.
Recordó que el gobierno de los Estados Unidos ofreció una recompensa de 10 millones de dólares para quien entregara vivo o muerto a al Jolani, y ahora entró triunfante en la nación árabe.
«Y ya anunciando que se impone en Siria todo lo que es la religión fundamentalista más radical, pero hay otros grupos que piensan de otra manera, o sea, ese es un país que está totalmente cuarteado. Allí solo un milagro, pero aun siendo escépticos, nosotros nos sumamos a los llamados de Paz que han hecho muchos pueblos y organismos en el mundo», manifestó.
A decir del presidente de esta nación centroamericana, en Siria hay una guerra impuesta para apoderarse de ese territorio árabe ubicado en una zona estratégica.
“Dios ha de querer que llegue la paz a Siria, pero desgraciadamente pesa más la actitud diabólica de los que siguen disputándose tierras que les pertenecen a otros pueblos”, enfatizó.
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