“No creo que deba hablarse así de Canadá. (…) también es un país libre, independiente, soberano”, consideró la dignataria luego de que Trump llamara al primer ministro Justin Trudeau en un mensaje en redes “gobernador” del “gran estado de Canadá”.
Sheinbaum sostuvo este miércoles que las tres naciones deben tratarse como iguales.
“Es finalmente la máxima de (Benito) Juárez (expresidente) que entre las personas como entre las naciones el respeto al derecho ajeno es la paz, y tiene que ver con la fraternidad universal que siempre hemos defendido nosotros”, aseveró la jefa de Estado en su habitual conferencia de prensa.
Al preguntársele sobre algún comentario semejante que emita Trump pero en el caso de México, expresó que “tampoco es que vamos a estar contestando cualquier declaración” y confió en la existencia de una buena relación con la futura administración estadounidense.
“En la defensa de nuestra soberanía y los intereses del pueblo de México y de la nación vamos a buscar colaborar y coordinarnos, y además somos socios comerciales y hacemos una economía conjunta muy poderosa y fuerte frente a la competencia con otras regiones del mundo”, agregó.
El lunes último, Sheinbaum le recordó a Trump que Estados Unidos recibe muchos beneficios del tratado comercial entre los tres países de Norteamérica, después de que este hubiera dicho que su país “subsidia” a México y Canadá.
Él “fue quien firmó el T-MEC (acuerdo entre México, la nación vecina y Canadá) y Estados Unidos ha tenido muchísimos beneficios del tratado, entonces pues ya habrá momento para poder hablar de estos beneficios”, aseveró la dignataria.
Hace dos semanas, el próximo mandatario estadounidense prometió colocar impuestos de 25 por ciento a todos los productos provenientes de México y Canadá desde el primer día de su administración, en enero del año venidero, debido a la inmigración ilegal y el “crimen y las drogas”, según dijo.
“No es con amenazas ni con aranceles como se va a atender el fenómeno migratorio ni el consumo de drogas en Estados Unidos. Se requiere de cooperación y entendimiento recíproco a estos grandes desafíos”, le señaló en una carta la jefa de Estado.
Advirtió, asimismo, que “a un arancel, vendrá otro en respuesta, y así, hasta que pongamos en riesgo empresas comunes”.
Según estimaciones de la Secretaría de Economía del país latinoamericano, Estados Unidos perdería unos 400 mil empleos y se reduciría su crecimiento de concretarse la subida de aranceles anunciada por Trump.
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