“Es un logro muy importante por lo que significa una restauración, que favorece dos aspectos: la seguridad de los estudiantes y docentes, que es primordial, y genera mejores condiciones para aprender”, expresó el viceministro Técnico de Educación, Francisco Cabrera.
En las semanas que restan para finalizar el año podríamos alcanzar otros 100 centros, subrayó el funcionario, citado por el oficial Diario de CentroAmérica, mientras el propósito fijado hacia 2028 es llegar a 35 mil 922.
Este 2024 –según datos de la cartera- se destinaron 750 millones de quetzales (poco más de 97 millones de dólares) a este programa, monto a invertir en el cercano período anual para conseguir una cantidad similar.
Los remozamientos incluyen mantenimiento preventivo, y reparaciones coordinadas con las organizaciones de Padres de Familia, lo cual contempla trabajos en techos, muros, cocinas y baños de los centros educativos.
Entre las regiones con mayores escuelas públicas reparadas aparecen Quiché con 686, Alta Verapaz 669, este departamento capital 564 y Huehuetenango con 505, de un total de siete mil 76 documentadas en un sitio web del Ministerio de Educación.
“En cuatro años vamos a ver remozadas todas y cada una de las escuelas”, remarcó el presidente de la nación, Bernardo Arévalo, en junio pasado.
El mandatario afirmó luego que el nivel de ejecución del presupuesto del país ha sido superior al promedio de las administraciones anteriores, con alguna cartera más limitada, “pero vamos progresando”.
En entrevista concedida a la emisora La Red, aseveró que tiene claro que las expectativas en torno al Gobierno son más altas que las de épocas pasadas y lo importante es obtener resultados concretos, cuestiones que la gente pueda ver.
Nuestra gestión pública está construida a partir del compromiso para efectivamente cambiar la forma de administración de los últimos años, insistió Arévalo.
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