Desde la visión mexicana, el patrimonio cultural no constituye un bien de valor comercial o de coleccionismo, “por el contrario, es portador de las identidades, de los pueblos, su historia y su futuro”, consideró la jefa de Exposiciones Internacionales y Cooperación Multilateral, Iraís Avilés.
El secretario técnico del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), José Luis Perea, recordó que la institución interpuso una denuncia inmediata, tras el conocimiento del robo de esta y otras cinco imágenes de la capilla de Santa Mónica, en el estado de Hidalgo, en 2007.
Así, continuó el antropólogo, el INAH coadyuvó con la entonces Procuraduría General de la República (actual Fiscalía), en la integración de las averiguaciones previas, cuyo resultado fue la ubicación en territorio estadounidense de la talla en madera estofada, policromada y enchapada en lámina de oro.
En declaraciones versionadas por un comunicado de la Secretaría, Perea recordó que la lucha contra el flagelo del tráfico de bienes culturales es una de las prioridades del INAH, que ha adoptado un enfoque multidisciplinario con la participación de diversos especialistas.
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