Los tanques del ejército israelí avanzaron desde la localidad de Markaba hacia Bani Hayyan y dispararon ráfagas en dirección a las casas, en esta zona del sur libanés, reflejaron reportes de prensa.
De acuerdo con los informes, las fuerzas de Tel Aviv llevaron a cabo bombardeos en los poblados de Shihin y Yaroun; además de detonar edificios en la aldea de Kfar Kila.
A su paso por Bani Haiyyan, los militares israelíes derribaron una mezquita y varias viviendas.
Según el alcalde de Naqoura, el 70 por ciento del poblado está destruido como consecuencia de las acciones israelíes desde el comienzo de la tregua el 27 de noviembre. Al amanecer, drones israelíes sobrevolaron el suburbio del sur de la capital Beirut.
Este miércoles, la segunda reunión del comité de supervisación de la implementación del acuerdo de alto al fuego tendrá lugar en la sede de la unidad italiana de la Fuerza Provisional de las Naciones Unidas (Unifil) cerca del cruce de Ras Naqoura.
Ayer, el Ministerio de Relaciones Exteriores destacó la necesidad de la retirada de Israel de los territorios ocupados, así como el éxito del mecanismo para implementar el cese al fuego.
En un encuentro con el jefe de Misión del Organismo de las Naciones Unidas para la Vigilancia de la Tregua, Patrick Gauchat, el canciller Abdullah Bou Habib subrayó la urgencia de continuar la cooperación existente con la Unifil para lograr la estabilidad y la calma en el sur.
Medios de comunicación libaneses señalaron que el número de violaciones israelíes al acuerdo de alto al fuego superó las 215 infracciones con más de 30 muertos y cerca de 40 heridos, incluido la demolición de viviendas y la presencia constante de aviones de reconocimiento sobre el espacio aéreo nacional.
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