En un comunicado, el Ministerio de Asuntos Exteriores paquistaní calificó de desafortunada y parcial la decisión de Estados Unidos de imponer medidas coercitivas contra el NDC, responsable del programa de misiles balísticos, y las empresas Affiliates International, Akhtar and Sons Private Limited y Rockside Enterprise.
Para justificar su acción, el Gobierno norteamericano dijo que el NDC, ubicado en Islamabad, ha trabajado para adquirir artículos que impulsan el programa de misiles balísticos de largo alcance de Pakistán, incluidos chasis de vehículos especiales destinados a ser utilizados como equipo de apoyo al lanzamiento y prueba.
La Cancillería paquistaní consideró la medida de Washington como un desafío al objetivo de la paz y la seguridad y precisó que tales políticas tienen implicaciones peligrosas para la estabilidad estratégica de la región y más allá.
Aseguró que Pakistán se adhiere estrictamente a las normas de no proliferación de armas y que las capacidades estratégicas del país están destinadas a defender su soberanía y preservar la paz y la estabilidad en el sur de Asia.
Agregó que los dobles raseros y prácticas discriminatorias en ese sentido socavan la credibilidad de las normativas sobre la no proliferación y ponen en peligro la paz y la seguridad regionales e internacionales.
jha/lrd