En sus declaraciones a ese medio informativo, la diplomática se refirió a las actuales dificultades que enfrenta su nación, en particular un “criminal bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos que ya ha durado más de 60 años”, violatorio de los derechos humanos de la población cubana.
«Hay que decir que Cuba, como todos los países del mundo, enfrenta una crisis económica internacional que existe desde la Covid-19”, expresó, y añadió que este año fue duro para la economía de la Isla, en particular los dos últimos meses “con dos ciclones especialmente destructivos en el mismo mes, y un terremoto”.
Por otra parte, “el sistema de energía eléctrica, que es antiguo y requiere constantes reparaciones, ha sido desconectado en tres ocasiones”, también como consecuencia del bloqueo estadounidense, que dificulta en extremo las acciones del gobierno cubano para mantener en funcionamiento las termoeléctricas.
Ante esta situación, Cuba está “cambiando la matriz energética del país hacia energías más limpias, solar, eólica, también para mitigar el problema de los precios de los combustibles”, apuntó.
Sobre las relaciones con Italia, expresó que son excelentes y de respeto mutuo, pues “tenemos una tradición de amistad que se remonta al pasado y no depende de gobiernos individuales ni de los cambios que se están produciendo.
“Son relaciones consolidadas, porque nos unen muchas tradiciones, una historia común, y hay margen para fortalecerlas aún más”, aseveró.
“Italia fue un país que aportó mucho a la cultura y la historia de Cuba, con los muchos italianos que participaron en la lucha por nuestra independencia”, recordó, y resaltó que “dentro de mi país encontramos signos de la cultura italiana por todas partes y nuestra gente es parecida, cercana en sus tradiciones”.
Citó recientes ejemplos de colaboración en el campo de la salud, con dos brigadas médicas cubanas que auxiliaron a la población italiana durante los días más duros de la pandemia de Covid-19, y más de 300 médicos de su país que actualmente prestan asistencia sanitaria en la sureña región de Calabria.
“Siempre digo que también están devolviendo esta amistad y este calor humano de los italianos hacia mi país”, enfatizó la embajadora.
A una pregunta relacionada con las relaciones entre Cuba y Estados Unidos y su futuro ante la llegada del nuevo presidente, Donald Trump, Granda manifestó que “Cuba siempre ha mostrado su voluntad de tener relaciones estables con los países vecinos”.
“Aunque el primer período del gobierno de Trump fue particularmente agresivo, estamos listos para iniciar esta nueva etapa” y “esperamos que en el futuro, en este nuevo mandato, sea un poco más sabio”, agregó la embajadora cubana.
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