La operación tuvo lugar en la zona rural del Valle del Cauca, en el suroeste del país y contó con la presencia de un pastor de una iglesia local y de autoridades étnicas del territorio.
“El personal de salud que acompañó la misión examinó a las personas que nos entregaron y, tras confirmar que se encontraban en óptimas condiciones de salud, las trasladamos a otra zona para facilitar el reencuentro con sus familias”, refirió sobre el suceso la delegada del CICR encargada de esta operación, Mariana Sandoval.
Añadió que el derecho internacional humanitario protege a las personas que no intervienen o que han dejado de participar en las hostilidades, lo cual incluye a las personas que se encuentran en poder de grupos armados no estatales.
“En esta operación actuamos como intermediario neutral para asegurar que la vida y la integridad de las personas liberadas fueran respetadas”, expresó en referencia al papel desempeñado por la Cruz Roja.
Durante el transcurso de este año, el CICR facilitó la liberación de 30 personas que se encontraban en poder de grupos armados.
Ese organismo aprovechó para recordar en su comunicado su disposición de facilitar operaciones humanitarias como intermediario neutral a todas las partes de los conflictos armados u otros actores.
También hizo un llamado para que se respete y acaten los postulados del Derecho Internacional Humanitario.
npg/ifs
