Según conoció Prensa Latina, la agricultura Urbana en Sancti Spíritus pudo encauzar la continuidad productiva en varios surtidos de vegetales de hojas y contribuir al interés nacional de lograr simiente que envía a otros territorios.
Este resultado, aun con posibilidad de crecer, forma parte de la estrategia de ampliar el aporte científico-técnico en la agricultura del hogar, en las comunidades y beneficiando a cosecheros tradicionales y populares.
Los directivos de la Agricultura en el territorio apuestan por garantizar semillas de seis cultivos rústicos compatibles con el clima y de alta demanda todo el año.
La provincia referencia en la creación y consolidación de organopónicos populares y otros vinculados al autoconsumo, reciben estos beneficios y cumplen sus planes con semilla nacional.
Los espirituanos tiene en función del abastos de hortalizas y vegetales cerca de 200 organopónicos de diferentes dimensiones con tierras y agua suficiente, personal capacitado, el empleo de medios tradicionales y el aporte de medios científicos.
Técnicos del Programa de la Agricultura Urbana, Suburbana y Familiar, explican, que la prioridad en estas pequeñas parcelas son la lechuga, acelga, col china, rábano, quimbombó y la habichuela, además incluyen huertos de plastas medicinales.
Los avances en la práctica, explica, parten de localizar tierras óptimas para lograr la simiente que debe conservarse de un año para el otro, lo cual le es más factible a los productores
Dicho resultado sale de la red de fincas municipales de semillas y de los propios organopónicos, aun cuando habrá que refrescar ese material genético a través de la importación.
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