El Plan Belén, ejecutado en diciembre, fue una muestra contundente de cómo se articulan las fuerzas policiales para proteger a la población, subrayó el titular en conferencia de prensa desde el Palacio Nacional de la Cultura, sede del Ejecutivo.
Los resultados no sólo garantizaron la tranquilidad de miles de familias durante las fiestas de Navidad y fin de año, sino que también dejaron claro que la seguridad no tiene pausa ni hace descanso, remarcó la autoridad.
Mencionó la creación el 8 de febrero del Grupo Especial contra las Extorsiones, que marcó un antes y un después de la capacidad para enfrentar este flagelo que afecta a miles de personas y empresas.
Inauguramos una prisión de máxima seguridad que representa un nuevo estándar en la contención de criminales peligrosos, agregó el jefe de la cartera de Interior.
Este año la Policía Nacional Civil capturó a más de 43 mil individuos que infringieron la Ley, entre ellos una cifra superior a los dos mil 500 extorsionistas, acotó.
Llamó a no olvidar el récord histórico de incautación de drogas (18,2 toneladas), destrucción de pistas clandestinas y de sedes de extraditables a Estados Unidos.
El ministro consideró que ello es el resultado de un plan estratégico bien trazado, con una visión clara y con un equipo totalmente comprometido.
Agradeció la confianza y liderazgo del presidente Bernardo Arévalo, quien nos ha dado las herramientas y el respaldo necesario para actuar con contundencia, dijo.
Reconoció a los viceministros, directores generales y a cada uno de los elementos de las fuerzas policiales y del sistema penitenciario.
El 2025 nos plantea desafíos aún mayores, pues las estructuras criminales evolucionan y nosotros también debemos hacerlo, expresó el titular.
Mantendremos las acciones que dieron resultados, pero asimismo reforzaremos y rediseñaremos nuestras estrategias con aquellas directivas que impacten a todos los niveles del crimen organizado, advirtió.
Adelantó el mandato dado por el jefe de Estado en cuanto que tienen que recuperar los territorios, departamentos, no solo tener el área metropolitana como prioritaria.
A un año casi del mandato, sigue entre los retos de Arévalo y su administración la inseguridad ciudadana, donde se destacan los asesinatos y extorsiones.
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