El accidente ocurrió la víspera, a la vista de numerosas personas que disfrutaban de sus vacaciones de verano; por tanto, familias con niños fueron testigos de la caída de la aeronave, que provocó también la muerte del piloto, relató a la prensa el jefe del estado de Australia Occidental, Roger Cook, durante una conferencia.
La turista suiza tenía 65 años de edad, y el danés, 60, detalló el funcionario, mientras cuatro pasajeros sobrevivientes fueron trasladados al Hospital Real de Perth para recibir tratamiento médico.
El estado de salud de estas personas no fue revelado, solo que entre ellos se encuentran una mujer y un hombre de Suiza y dos australianos.
La policía investiga el trágico suceso y entrevista a todos los testigos dispuestos a cooperar.
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