El Ministerio de Asuntos Exteriores y Expatriados criticó en un comunicado el silencio internacional ante los crímenes cometidos por las fuerzas de seguridad israelíes en ambos territorios.

Asimismo, calificó de insuficiente “algunas declaraciones que expresan preocupación, advertencias y demandas” sobre el tema.

La cartera acusó, otra vez, a las tropas del vecino país de cometer crímenes de guerra y contra la humanidad.

Incluso, subrayó, muchos dirigentes israelíes se jactan en público de sus planes para anexar Cisjordania y liquidar la causa palestina, denunció.

La Cancillería afirmó que mantiene una intensa campaña “política, diplomática y jurídica en los centros de decisión de los países y a nivel de organismos internacionales especializados y de la ONU” para presionar por el cese de la agresión y la ocupación israelí.

También condenó la decisión del gobierno de Benjamin Netanyahu de impedir desde hace 12 días la entrada de ayuda internacional a Gaza, un territorio devastado por 15 meses de ataques.

Vemos con extrema preocupación la escalada de los crímenes israelíes y las medidas de anexión anunciadas en Cisjordania, incluida Jerusalén Este, y la perpetración de las formas más atroces de limpieza étnica y el abuso de los ciudadanos, subrayó. Asimismo, rechazó los castigos colectivos, la instalación de puestos de control y la constante ampliación de las colonias judías en la Ribera Occidental, donde viven más de 750 mil israelíes, pese al rechazo global a esa política.

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