El secretario general de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Carsten Linnemann, reconoció el disenso existente con el Partido Socialdemócrata, aunque manifestó optimismo en cercanos avances.
Soy optimista. Naturalmente hay diferencias entre los partidos, lo cual es normal. No nos vamos a dejar presionar, llegar a un buen acuerdo de coalición es más importante que la velocidad, dijo Linnemann en una conferencia de prensa en esta capital.
Inicialmente, el líder de la CDU y virtual canciller, Friedrich Merz, fijó como meta llegar a un acuerdo en Semana Santa pero no se descarta que las negociaciones tomen más tiempo. La gente votó por un cambio, no por una nueva versión de la anterior coalición de Gobierno, dijo Linnemann citado por la prensa local.
Existen discrepancias con respecto a la forma como se quiere financiar una rebaja del impuesto de sociedades: mientras que la CDU y su hermana bávara la Unión Socialcristiana (CSU) quieren hacerlo con recortes presupuestarios, el SPD propone la creación de un impuesto a las transacciones financieras.
En cuanto a la migración irregular, el punto de discordia es la devolución de demandantes de asilo a otros países de la Unión Europea donde estos estén registrados.
Mientras que la CDU/CSU considera que es suficiente informar a los países de las devoluciones en caliente, el SPD considera necesario llegar a acuerdos concretos con los socios.
Los resultados de los grupos de trabajo deben ser analizados y comparados, dijo secretario general del SPD, Matthias Miersch Miersch a la televisión NTV.
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