“Debido a las múltiples contradicciones que se presentaron en la investigación del caso de la muerte del señor J.C. en el Trópico de Cochabamba, se procedió a la aprehensión de tres efectivos policiales”, escribió el titular en sus redes sociales, respecto a la muerte ocurrida el 26 de marzo último.
Añadió que, de acuerdo con las investigaciones, “existieron dos disparos a la víctima, uno de ellos por la espalda, lo que da indicios dudosos del uso proporcionado de la fuerza por legítima defensa”.
Esta prueba pericial desmiente la versión sostenida por el viceministro de Régimen Interior, general Jhonny Aguilera, quien sostuvo este lunes entrevistado por el canal estatal Bolivia Tv que la versión brindada por testigos de los hechos era “desinformación” y argumentó que la Policía actuó en defensa propia.
Añadió que Jhonny (Cruz) se encontraba armado y efectyó disparos a un funcionario de la Policía, quien, en legítima defensa, «efectúa disparos a la pierna, como es normal”, aseveró Aguilera el lunes a Bolivia Tv.
Del Castillo agregó que no se pudo encontrar la presunta arma de fuego que utilizó la víctima; sin embargo, señaló la existencia de un video en el que se ve a un funcionario policial que sale del lugar y amenaza con su arma de fuego sin cumplir procedimiento habitual para estos casos.
“La Policía presentó un informe de la existencia de 15 extranjeros en el lugar con quienes existiese cruce de fuego, no obstante, no se pudo comprobar esto”, agregó el ministro.
Reiteró el titular que, tras el envío de un contingente de investigadores por la muerte del dirigente afín a Evo Morales en el Trópico de Cochabamba, se encontraron contradicciones en los informes de los policías que participaron en los hechos.
“En sus informes (policiales) e informes periciales de los médicos forenses hemos encontrado bastantes contradicciones. Vamos a tener que pedir el mayor peso de la ley en contra de estas personas».
El domingo último, el expresidente Evo Morales denunció el asesinato de Cruz, por lo cual dio un plazo de 48 horas para que detuvieran al policía que disparó contra el dirigente campesino juvenil.
Los sectores afines a Morales, por su parte, de manera reiterada denuncian que el exdignatario fue objeto de un intento de magnicidio con 20 disparos por fuerzas policiales en el Trópico de Cochabamba el 27 de octubre, quienes después se retiraron en un helicóptero, y deploran que hasta el momento no se haya investigado a los culpables. rc/jpm