El Ministerio de Asuntos Exteriores y Emigrantes condenó en un comunicado las palabras de Netanyahu y de los titulares de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, y de Finanzas, Bezalel Smotrich, conocidos por sus posturas de extrema derecha y antiárabes.
Si el primero se jactó de que impediría el regreso de los palestinos al norte del enclave costero, los otros dos abogaron por el desplazamiento de los gazatíes hacia otros países árabes y el retorno de los colonos judíos al territorio.
Esos comentarios confirman nuestras denuncias sobre los verdaderos objetivos de la agresión israelí, “que se resumen en deshacerse de cualquier manera de la población de la Franja”, subrayó el texto.
Ese plan explica el interés de la derecha israelí por prolongar la guerra y aumentar la escala de las masacres para facilitar el desplazamiento de la población al extranjero, aseguró.
El Ministerio alertó que el gobierno israelí copiará ese proyecto para implementarlo en Cisjordania.
Llamamos a la comunidad internacional, y en especial a Estados Unidos, a rechazar estas posiciones racistas y extremistas, así como el terrorismo, el genocidio y la represión resultantes contra nuestro pueblo, expresó.
En los últimos meses, tanto las autoridades como los partidos palestinos intensificaron sus acusaciones y críticas contra Washington por su decidido apoyo a la agresión israelí.
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