Los datos del Centro Nacional de la Cinematografía (CNC) reflejan una afluencia de cerca de 181 millones de personas a las salas, superior a las 152 millones reportadas en 2022, pero aún muy por debajo de las 213 millones que lo hicieron en 2019, antes de la irrupción de la pandemia.
Una parte importante del mercado en el séptimo arte correspondió al cine local, que se esfuerza por plantarle cara al poderío y al dominio de Hollywood, aunque los filmes estadounidenses volvieron a liderar la asistencia, con 74,7 millones de espectadores, mientras los franceses atrajeron a 72.
Entre las cintas más taquilleras del año que culminó resaltaron las norteñas Super Mario Bros, la película, con más de siete millones de entradas, Barbie (5,8) y Avatar: el camino del agua (cinco), y las francesas Astérix y Obélix: el imperio medio (4,5) y Alibi,com 2 (4,2).
Entrevistado por el diario Le Figaro, el presidente de la Federación Nacional de Cines Franceses (FNCF), Richard Patry, mostró satisfacción por el regreso a las salas de niños y adultos.
Fue un año excepcional, Francia es el país que más rápido ha encontrado el camino de la recuperación, dijo.
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