En el Grand Serail (Palacio de Gobierno), el jefe del gabinete en funciones indicó la disposición del país a entablar negociaciones para lograr un proceso de estabilidad a largo plazo en el sur del Líbano y en las fronteras norte de la Palestina ocupada (Israel).
Al mismo tiempo, reiteró su compromiso con las leyes internacionales, el acuerdo de armisticio y la Resolución 1701, esta última adoptada el 11 de agosto del 2006.
En este contexto, enfatizó en la búsqueda de la estabilidad permanente y en una solución pacífica duradera, “pero a cambio recibimos advertencias a través de delegados internacionales sobre una guerra contra Líbano”.
Ante estas posiciones extranjeras, Mikati preguntó a tales funcionarios: ¿Apoyan la idea de la destrucción? ¿Es aceptable lo que está sucediendo en Gaza?».
En esta misma línea, el presidente del Parlamento, Nabih Berri, presentó al enviado de la ONU un estudio con las ubicaciones, los daños, el número de víctimas y las zonas agrícolas afectadas como consecuencia de los bombardeos israelíes y el uso de municiones de fósforo, prohibidas internacionalmente.
Berri elogió los esfuerzos de la Fuerza Provisional de Naciones Unidas (Unifil) en esta etapa y denunció los ataques israelíes contra zonas residenciales, civiles e incluso a ambulancias y personal de los medios de comunicación, en violación no solo de la Resolución 1701 sino de todas las reglas de enfrentamiento.
En este punto, el ministro de Defensa Nacional, Maurice Slim, destacó la necesidad de poner fin a los ataques de Tel Aviv contra la nación levantina y exigir la retirada sionista de los territorios libaneses ocupados.
Al sostener un encuentro con el subsecretario de Operaciones de Paz, Slim reconoció el papel de la Unifil para el retorno de la calma y la estabilidad en cooperación con el Ejército libanés.
Durante la fecha, Lacroix discutió con el comandante de las Fuerzas Armadas, general Joseph Aoun, la situación general del país y el escenario a lo largo de la frontera sur.
En sus actividades, llamó a todas las partes a calmarse, apoyar al Ejército en el sur del Líbano y continuar la estrecha cooperación con la Unifil.
A propósito, afirmó el compromiso del secretario general y de Naciones Unidas con Líbano y sus continuos esfuerzos para reducir la escalada y alcanzar un alto al fuego permanente.
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