Según explicó el ministro para la Industria de Defensa, Pat Conroy, la inyección de capital ascenderá por el momento a 400 millones de dólares australianos (unos 260 millones de dólares estadounidenses).
“Este es el primer avión militar diseñado, desarrollado y fabricado en Australia en más de 50 años y subraya la profundidad de la innovación y la experiencia en nuestra industria de defensa,”, alegó el titular.
De acuerdo con lo previsto, el incremento de la financiación permitirá centrarse en el desarrollo de los sistemas de autonomía y combate integrado, sensores y cargas útiles de los artefactos
“Es de suma importancia brindar a nuestra Fuerza Aérea las capacidades críticas que necesita para proteger a los australianos y sus intereses”, indicó Conroy en un comunicado.
Más de 200 empresas australianas participan en el proyecto que dará trabajo a unos 200 proveedores.
El nuevo dron podrá proteger y apoyar a pilotos y activos militares de Australia y realizar una amplia gama de actividades a grandes distancias, incluidas las misiones de combate, señala el texto.
Actuales conflictos en el mar Rojo, el Oriente Medio o entre Rusia y Ucrania dan cuenta del empleo creciente de los drones con fines bélicos.
Tras su reciente nombramiento, el nuevo comandante en jefe de las Fuerzas Armadas de Ucrania, Oleksander Sirski, aseguró que una de sus principales prioridades es fomentar “experiencias exitosas” como el uso de vehículos aéreos no tripulados y la guerra electrónica.
Este viernes el Ministerio de Defensa sirio informó que la artillería antiaérea del país derribó cerca de Damasco, la capital, dos drones provenientes del territorio sirio del Golán, ocupado por Israel.
Mientras la cartera rusa de Defensa corroboró que “anoche se frustró un intento del régimen de Kiev de perpetrar un ataque terrorista con 19 vehículos aéreos no tripulados contra instalaciones en el territorio de la Federación de Rusia”.
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