La institución reportó que la constante actividad sísmica inició el viernes último, con un temblor de magnitud 1.5 grados en la escala Richter, y los rangos se encuentran entre 1 y 4,7 precisó.
La secuencia sísmica se genera a nueve kilómetros al noroeste de San Isidro de Pérez Zeledón, al sur de esta capital, informó la institución.
El sismo principal de la secuencia fue de 4,7, evento que disparó, hasta el mediodía de este sábado, 190 microsismos con magnitud menor a 3,6, señaló el reporte.
Según el análisis de los expertos, la secuencia sísmica está ocurriendo a lo largo de fallas locales, con profundidades entre 10 y 18 kilómetros.
El Ovsicori observó, además, que la mayoría de los sismos son de desplazamiento de rumbo, que presentan un mecanismo de ruptura con geometría normal, característicos de un régimen tectónico en extensión.
Para los especialistas, esa región de Costa Rica forma parte de las cinco más activas sísmicamente durante el 2023, continuando con un nivel de actividad importante desde inicios de este 2024.
A pesar de que la mayor actividad se reporta en Pérez Zeledón, el Ovsicori informó que también hay reportes de sismos en el sector de Vara Blanca.
También hemos tenido y estamos registrando una secuencia sísmica en la región de Vara Blanca al norte, entre los macizos del volcán Barva y principalmente en la ladera noreste del volcán Poás, detalló el sismólogo, Marino Protti.
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