Para el representante palestino, las declaraciones de Washington representan una operación engañosa destinada a crear presión sobre la resistencia, y «esto no tendrá éxito».
En declaraciones al canal panárabe Al Mayadeen, Hamdan destacó que “uno de los resultados más importantes de la operación del Diluvio de Al-Aqsa fue detener los planes estadounidenses de moldear la región y su futuro de acuerdo con los intereses de Washington y la ocupación”.
Según él, si la Casa Blanca y Tel Aviv insisten en continuar con el genocidio en Gaza «no tenemos más opción que seguir defendiéndonos».
Al mismo tiempo, renovó el rechazo a la continuación de la agresión, el asedio y el hambre, y exigió que estas cuestiones sean el comienzo de cualquier curso de tratamiento para los acontecimientos.
«No esperamos a que nadie nos dé la victoria, sino que la creamos nosotros mismos», enfatizó.
Rechazó todas las acusaciones de los medios israelíes respecto a la salida del jefe de Hamas en Gaza, Yahya Sinwar, al Sinaí, así como la existencia de desacuerdos dentro de las filas del movimiento.
A propósito, subrayó que la Resistencia no está vinculada a las personas, a pesar del valor y la importancia de estas, sino es el proyecto del pueblo palestino en el camino a la liberación.
«Las relaciones entre las fuerzas del eje de la resistencia fueron escritas con sangre y sacrificios y no pueden ser rayadas por la propaganda negra”, apuntó.
En este contexto, manifestó que “la adopción por parte de la Knesset (Parlamento israelí) de la declaración de Benjamín Netanyahu rechazando el establecimiento de un Estado palestino confirma que el único camino para el pueblo palestino es la resistencia”.
A criterio de Hamdan, hay presión dentro del gobierno israelí para imponer restricciones a los fieles en la mezquita de Al-Aqsa y expresó que este asunto tendrá repercusiones.
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