El jefe diplomático señaló que Washington «ha estado ideando varias tácticas para reprimir a China y ha seguido extendiendo su lista de sanciones unilaterales, alcanzando niveles desconcertantes de absurdo insondable».
Durante una conferencia a propósito de la segunda sesión de la XIV Asamblea Popular Nacional (APN), el titular de Relaciones Exteriores señaló que no obstante, hay algunas mejoras en las relaciones bilaterales desde la cumbre de San Francisco entre los dos jefes de Estado.
Lo anterior «está en consonancia con los intereses y deseos de los pueblos de ambos países y del mundo», apuntó.
Wang Yi recordó que en la reunión de noviembre pasado, el presidente estadounidense Joe Biden aseguró que Washington no busca una nueva Guerra Fría, ni cambiar el sistema de China o contener su desarrollo, y tampoco apoya la independencia de Taiwán.
«Si Estados Unidos dice una cosa y hace otra, ¿dónde está su credibilidad como país importante? Si se pone nervioso cada vez que escucha la palabra ‘China’, ¿dónde está su confianza como país importante? Si sólo quiere prosperar, pero niega el desarrollo legítimo de otros países, ¿dónde está la justicia internacional?», se preguntó el canciller.
El ministro enfatizó que esta política de Washington contra el gigante asiático dañará a la parte norteamericana eventualmente: «El desafío para Estados Unidos viene de sí mismo, no de China», resaltó.
Además, el canciller señaló que los nexos entre ambas partes deben sostenerse en base al respeto mutuo, la coexistencia pacífica y cooperación de beneficio mutuo.
«Los dos países tienen diferentes sistemas sociales y estructuras políticas, sólo respetando y reconociendo estas diferencias pueden sostenerse las interacciones», apuntó.
En otro momento de la conferencia, Wang Yi defendió un mundo multipolar ordenado y una globalización económica universalmente beneficiosa para hacer frente al unilateralismo y el autoritarismo de «algunos países» que quieren monopolizar las relaciones internacionales.
De hecho, se opuso a la creación de bloques y las alianzas en detrimento de otras naciones, al tiempo que subrayó la necesidad de que todos tengan igualdad de derechos.
Según dijo, el impulso de una nueva gobernanza global y la defensa de una mayor representatividad de los mercados emergentes y países en desarrollo, son tareas de la diplomacia china para 2024.
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