Durante el balance anual del organismo, celebrado la víspera, el jefe de Estado destacó el conocimiento de las personas que están al frente de las entidades de Recursos Hidráulicos en los diferentes territorios del país, porque tienen dominio de las problemáticas y plantean soluciones.
Habló además sobre la confianza que los trabajadores del estratégico sector inspiran; y resaltó la importancia de dos premisas para seguir adelante: voluntad y trabajar mejor, según publicó este domingo la prensa presidencial.
Por su parte el primer ministro, Manuel Marrero, expresó que el país está en un escenario de economía de guerra, y no puede permitirse el lujo de seguir haciendo un poco más de lo mismo.
En este sentido, llamó a “pensar de una manera diferente para buscar soluciones diferentes.
Sobre el comportamiento de la situación hidrológica en el archipiélago, se enunció que al cierre del 2023 la misma podía catalogarse de favorable, y que en tal sentido los territorios del oriente del país eran los que habían recibido mayores beneficios.
En lo concerniente al desarrollo de la infraestructura hidráulica de abasto, mejoró en el año anterior la proporción de población que dispone de servicios de suministros de agua potable.
A lo anterior contribuyeron la terminación de 386; así como la adquisición de 947 equipos de bombeo, la reposición de 544, y la ejecución de 425.2 kilómetros de nuevas redes, conductoras y conexiones de servicios de abasto de agua.
En cuanto al desarrollo de la infraestructura hidrosanitaria, se dijo que los esfuerzos inversionistas y las acciones de mantenimiento avanzaron, al tiempo que constituye una prioridad el monitoreo de la calidad del agua, cuya red abarca el 99,8 por ciento del territorio nacional.
La alianza con actores del entramado económico, la búsqueda de fuentes seguras de financiamiento y la vital transformación de la matriz energética estuvieron entre los desafíos del INRH.
Para el 2024 el organismo tiene entre sus metas contribuir a reimpulsar la economía del país, acrecentar las condiciones objetivas para el ahorro del agua, mejorar los servicios de abasto y saneamiento.
También prevé abastecer del preciado líquido a más de 22 mil habitantes que hoy son servidos por pipas, enmendar 50 zonas de inundación, y tomar parte en el mejoramiento de más de 230 barrios.
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