Los ciudadanos que no pudieron huir quedaron resguardados en sus casas, donde escuchaban con miedo y preocupación el resonar de las armas automáticas. Muchas tiendas están cerradas y es notable el poco movimiento de transeúntes.
Para protegerse de los ataques de las bandas criminales en algunos sitios fueron levantadas barricadas, y casi una veintena de cadáveres ya fueron encontrados tendidos en las principales arterias capitalinas.
Las calles Rebecca, Panamericana, Louverture y la Route de Frères, de gran afluencia de público estaban bien despejadas.
Los bandidos han operado en los barrios de Diègue, Doco, Métivier y Pégu-Ville, en este último Prensa Latina pudo escuchar un fuerte intercambio de disparos, desde la mañana con una pausa, al mediodía, y luego volvieron a abrir fuego con armas de diferentes calibres.
Desde donde transmite esta Agencia Latinoamericana de Noticias podía verse un dron monitoreando la zona del combate urbano, y cómo los choferes de automóviles y motos salían a toda velocidad de la zona.
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