En conferencia de prensa, Sano informó que 25 mil 761 de los clientes del CBE retiraron efectivo de los cajeros automáticos y realizaron transferencias digitales aprovechando la situación que dio acceso inadecuado a fondos.
Hasta ayer, precisó, recuperaron con éxito el 78 por ciento (más de 11 millones 681 mil dólares) de los fondos perdidos y esperan rescatar esta semana la cantidad restante que fue transferida a otros bancos, los cuales recibieron el pedido de congelarla.
El 20 de marzo, el CBE reclamó más de 785 mil 936 dólares de 10 mil 727 clientes con fondos suficientes en sus cuentas, informó Abe. Continuando con sus esfuerzos al día siguiente consiguieron más de tres millones 626 mil dólares de 15 mil ocho usuarios, a pesar de que sus saldos de cuenta eran insuficientes, agregó.
Según el presidente de la institución estatal bancaria etíope, nueve mil 281 clientes devolvieron voluntariamente la cantidad total que retiraron (más de tres millones 936 mil dólares), mientras que cinco mil 160 personas entregaron una parte de los fondos.
Actualmente 567 clientes no pueden devolver más de 172 mil 692 dólares a los que tuvieron acceso de forma indebida, ya sea parcial o totalmente. En ese sentido, Sano anunció que publicarán sus nombres y datos bancarios y esperará hasta el sábado, después de lo cual buscará medios legales para garantizar la rendición de cuentas.
Mencionó que la investigación sobre la falla del sistema, causada por una reversión de las transacciones realizadas durante el periodo, está en curso.
El 16 de marzo pasado, los clientes, principalmente estudiantes universitarios, pudieron retirar efectivo mientras que otros transfirieron digitalmente grandes sumas de dinero debido a un fallo causado por una actualización del sistema implementada horas antes del incidente, informó el CBE.
Subrayó que ha sido el objetivo principal de entidades que buscan atacar a Etiopía por razones económicas y políticas, así como la frustración con éxito casi 28 mil intentos de ciberataque desde 2022.
mem/nmr