«No quiero decir tonterías, pero el Mercosur, tal como se está negociando actualmente, va a ser un pésimo acuerdo para ustedes y para nosotros también, porque fue negociado hace 20 años», afirmó Macron, quien cumple una visita oficial de tres días a Brasil.
Como parte de su agenda de estancia, asistió en la jornada al Foro Económico Brasil-Francia, junto al vicepresidente Geraldo Alckmin, ministro de Desarrollo, y el de Hacienda, Fernando Haddad.
Antes, en el mismo evento, Haddad comentó que esperaba que el pacto se cerrara pronto.
Sin embargo, Francia resulta la principal fuerza de oposición para no celebrar el tratado.
«Es necesario reconstruir (el acuerdo) pensando el mundo como es actualmente, por ahora no está siendo considerado. Ese acuerdo no puede ser defendido, yo no lo defiendo», recalcó el gobernante galo.
Defendió además que un nuevo compromiso fuera construido «iluminado por objetivos» y con cláusulas permitiendo reciprocidad entre el Mercosur y la UE.
Inicialmente, el equipo del presidente francés no esperaba que Macron tratara sobre el Mercosur en ese encuentro.
Según asesores, la idea era que el tema se discutiera mañana durante la plática con el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, en Brasilia.
El mandatario francés desembarcó en la capital paulista después de agendas el martes junto a Lula en Belém, capital del norteño y amazónico estado de Pará, y este miércoles en Itaguaí, en Río de Janeiro.
Ambos líderes firmaron una alianza de un billón de euros para estimular inversiones en proyectos de bioeconomía en la Amazonia brasileña y en la Guayana Francesa, en los próximos cuatro años.
Mañana en esta capital, Macron será recibido con honores de jefe de Estado y se reunirá con su anfitrión Lula, en el Palacio del Planalto, sede del Poder Ejecutivo.
El encuentro tendrá énfasis en temas bilaterales y globales, además de culturales, pues 2025 marca los 200 años de relaciones diplomáticas entre los dos países.
Cuestiones como la reforma de las instituciones multilaterales, incluyendo el asiento permanente de Brasil en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, además de los conflictos entre Israel y el ala militar del movimiento palestino Hamás, y el de Rusia con Ucrania deben ser abordados por ambos.
Unos 30 textos podrán ser firmados por Lula y Macron, en diversas áreas.
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