En entrevista con Prensa Latina, la creadora confesó una conexión con el material a través de la escritora canaria Elsa López, una de las protagonistas, y de los relatos de quienes emigraron desde esa región de España hacia Cuba.
“En sentido general este es un pretexto para homenajear el dolor de las familias y para que se sientan identificados todos aquellos conectados a través de ese fenómeno global”, dijo.
La cinta presentada en el 24 Havana Film Festival de Nueva York recoge una aproximación al pasado común entre Cuba y España desde la tradicional Fiesta de los Indianos, una celebración masiva que agrupa cada año a visitantes, emigrados o sus familiares en La Palma, una de las islas Canarias.
En esa región se conoce como indianos a quienes retornaron desde Cuba a finales del siglo XIX y comienzos del XX.
“Nosotros somos parte de eso, este material sigue vigente a pesar de tratar un fenómeno de siglos atrás”, reconoció al respecto la también guionista de la cinta.
Aunque la realizadora advierte que siempre tuvo clara la idea que quería contar, la sorprendió la cantidad de material recopilado durante apenas un día de filmación en la festividad.
“Era tan sorprendente tener tanto y ponerlo sobre la mesa que lo difícil fue quedarnos en poco más de 50 minutos”, insistió.
Ese junto a la realización musical representaron los principales desafíos para el documental, antes presentado en el Festival del Nuevo Latinoamericano de La Habana y el Festival Internacional de Cine y Memoria Común en Nador, Marruecos.
Tras un intenso trabajo de investigación, Retorno dejó en Blanco un interés particular con los vínculos históricos de Cuba y a pensar más creaciones de este tipo.
“Tenemos en proyecto tratar que todo lo que tenga que ver con la memoria o la conservación y la historia de los cubanos en cualquier lugar del mundo sea identificada y contada”, aseguró.
Otro de sus planes es una propuesta de ficción sobre la poetisa cubana Dulce María Loynaz conjuntamente con el guionista Amílcar Salatti para contar lo que Blanco define como una parte muy curiosa de las letras en la isla.
No obstante, sus deseos de regresar a escena también acompañan su carrera, marcada por actuaciones en la televisión y el cine como Carmen, en La Cara Oculta de la luna; Doris, en Bajo un mismo sol o Azucena del Río, en El premio Flaco.
“Mis exigencias han cambiado y quiero que los personajes cumplan una expectativa diferente a una edad diferente. Estoy esperando esa oportunidad, un personaje que me conmueva y me haga no dormir como esos otros”, subrayó.
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