El portavoz adjunto del Emirato Islámico, Hamdullah Fetrat, señaló que el Ministerio de Refugiados y Repatriación creó comisiones para los migrantes que regresan y las personas desplazadas que han estado abordando sus problemas durante más de un año, y el trabajo en la construcción de viviendas para ellos avanza rápidamente.
Los comentarios se realizan cuando la organización internacional Save the Children dijo que la mayoría de los niños de familias afganas deportadas de Pakistán no tienen acceso a vivienda, educación ni alimentación adecuadas.
Citando una encuesta publicada este viernes, la entidad añadió que uno de cada tres niños se enfrenta a una crisis de hambre, y una de cada seis familias vive bajo una tienda de campaña.
Aproximadamente tres cuartas partes de los retornados y las familias en las comunidades de acogida redujeron el tamaño de las porciones o restringieron el consumo de alimentos de los adultos para que los niños pequeños pudieran comer al menos dos días de la semana anterior, apuntó Save the Children.
La organización añadió que casi ocho millones de niños en Afganistán – uno de cada tres– enfrentan niveles críticos de hambre; y sólo un tercio logró traer activos desde Pakistán; mientras que casi dos tercios (65 por ciento) de los niños que regresaron a Afganistán no están matriculados en la escuela.
Según el Ministerio de Refugiados y Repatriación, 555 migrantes afganos regresaron el miércoles último al país a través de los cruces fronterizos de Torkham y Spin Boldak.
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